Diagnóstico por ultrasonidos

Hay tres razones principales por las que el diagnóstico por ultrasonidos en la zona de la cabeza y el cuello es de gran importancia. En primer lugar, permite un examen suave, ya que la ecografía no implica ninguna exposición a la radiación. En segundo lugar, puede llevarse a cabo rápidamente. Se utiliza un gel inocuo, se extiende sobre la piel del cuello y la cara, se coloca el cabezal de la sonda sobre la piel del cuello y la cara y se obtiene una imagen significativa. En manos de examinadores experimentados, el examen ecográfico de los tejidos blandos del cuello sólo requiere un máximo de 30 minutos por paciente. En tercer lugar, el diagnóstico ecográfico de los tejidos blandos del cuello es un procedimiento de alta resolución que es incluso superior al diagnóstico por imagen, como la tomografía computerizada, para los cambios en los tejidos blandos del cuello y la cara.

El diagnóstico por ecografía se utiliza en la detección precoz de la inflamación de los ganglios linfáticos. Por ejemplo, tras la extirpación de un carcinoma de células escamosas de la piel de la cara, se puede determinar muy pronto si hay un crecimiento de los ganglios linfáticos en la zona del cuello o de la glándula parótida.

Las alteraciones de la glándula parótida, como las inflamaciones benignas de la glándula parótida o una enfermedad inflamatoria de la glándula salival submandibular, también pueden reconocerse muy bien mediante el diagnóstico ecográfico.

La experiencia del médico que realiza el examen ecográfico de los tejidos blandos del cuello es esencial para la certeza diagnóstica. Sin embargo, es igual de importante que se utilice un ecógrafo de alta calidad. Para nosotros es importante que le traten médicos con gran experiencia que utilicen la tecnología ecográfica más avanzada.